Realidades.- No es necesario ser un experto politólogo para dilucidar los intentos de boicot que ha afrontado la primera administración (2018-2021) de Morena en el Municipio de Solidaridad, Quintana Roo con el objetivo de mermar la transición política a nivel local, misma que es comandada a nivel nacional por Andrés Manuel López Obrador.
En el caso del Municipio de Solidaridad con cabecera en Playa del Carmen donde Laura Beristain logró un triunfo contundente a pesar de haber afrontado una elección con todo el aparato del Gobierno del Estado de Quintana Roo en respaldo de Cristina Torres Gómez (CT) que inclusive logró duplicar la votación conseguida en 2016 (16.000 votos) y conseguir 33 mil sufragios, sin embargo, Laura Beristain se convirtió en la mujer más votada de la historia del Municipio con más de 40 mil papeletas que arrasaron la elección de Estado cual tsunami lopezobradorista.
A partir de la concreción del triunfo, el equipo joaquinista preparó varios traspiés para administración entrante en Solidaridad, pero específicamente Cristina Torres y Filiberto Martínez diseñaron un plan jurídico para dejarle una «papa caliente» a la administración morenista de Laura Beristain, el juicio de REDESOL, empresa ligada a Filiberto beneficiada al estilo priista durante su administración en 2011 con una concesión para la recolección de basura durante 20 años, misma que Mauricio Góngora desconoció al incumplir el contrato en 2013, situación que deriva en el juicio contencioso administrativo entre el Ayuntamiento y REDESOL.
Durante los 2 años de la administración de Torres Gómez se dilató a través de juicios de amparo y otros recursos jurídicos la resolución de la controversia, sin embargo, al saberse derrotados en la elección de junio de 2018 y con 3 meses más en el poder para hacer el proceso de entrega-recepción orquestaron la «papa caliente» jurídica con el tema de la recolección de basura.
Prácticamente orillaron a la derrota jurídica al Municipio de Solidaridad orquestado internamente por Torres Gómez con el objetivo de sembrar el caos en un tema trascendental para un polo turístico como es el tema de la recolección de basura ligado directamente a la salud pública.
Era el plan perfecto para desestabilizar a una nueva administración. Provocar el caos en Playa del Carmen y Puerto Aventuras en medio de otro proceso electoral para renovar el Congreso de Quintana Roo.
Sin embargo, después de identificar a infiltrados en la administración municipal y de conformar un plan jurídico para afrontar la resolución, la administración de Laura Beristain dejó en evidencia a REDESOL como una empresa fantasma que no contaba con la infraestructura y la capacidad humana para realizar el servicio.
Después de demostrar la inviabilidad de la empresa REDESOL ligada a Filiberto y Torres Gómez, la administración morenista realizó nuevos contrato con las empresas; Promotora Ambiental de la Laguna (PASA) y BTM del Golfo y de forma transparente la Oficial Mayor informó que el contrato de arrendamiento tiene vigencia por 3 años (del 2019 al 2021), con un valor de 272 millones 098 mil 278 pesos por la operación de 27 camiones-compactadores.
Actualmente todo el Municipio de Solidaridad cuenta con un servicio eficiente de mayor calidad que administraciones anteriores, un síntoma de la cuarta transformación que no se detiene a pesar de la resistencia de los conservadores en Quintana Roo.

